El vicepresidente del Gobierno asturiano y presidente de Cogersa, Juan Cofiño, se ha mostrado partidario de que el consorcio recupere la gestión directa de la recogida separada de residuos en contenedores fijos siempre que sea posible jurídicamente.
Cofiño se ha expresado así este martes en su respuesta en el pleno de la Junta General del Principado a una pregunta del diputado de IU Ovidio Zapico sobre la situación creada en diversas ciudades, especialmente en Xixón, ante la decisión de la empresa concesionaria de ese servicio –Vareser– decidiera dejar de prestarlo y exigiera más dinero del previsto en el contrato de adjudicación.
Después de que el consejo de administración de Cogersa acordara estudiar la resolución de mutuo acuerdo del contrato con la empresa, tal y como ha solicitado la concesionaria que se ha comprometido a retomar el servicio a lo largo de esta semana, Cofiño ha señalado que, si la consulta jurídica es positiva, propondrá que se recupere la gestión directa tanto en lo relativo a los medios técnicos necesarios (camiones) como del personal encargado de llevarlo a cabo.
El vicepresidente ha señalado que así lo defenderá ante los órganos de gobierno de Cogersa, de los que forman parte los ayuntamientos asturianos a los que ha agradecido su “complicidad” y su colaboración en los últimos días para evitar que en las calles no se visualizase “excesivamente” el problema generado por la empresa al dejar de recoger los residuos de esos contenedores.
“Las externalizaciones y las privatizaciones traen consecuencias”, ha apuntado Zapico, que ha emplazado al Gobierno a no arriesgarse de nuevo con otro contrato dado que Cogersa reúne las condiciones necesarias para prestarlo directamente y avanzar en la seguridad laboral de los trabajadores que realizan esa tarea y que deben ser subrogados para seguir haciéndola.
Vareser, que lleva ocho años prestando el servicio de recogida separada de papel/cartón, envases ligeros y envases de vidrio como contratista de Cogersa, decidió de forma unilateral cesar en su prestación el pasado 3 de marzo alegando incremento de costes, algo que desde el consorcio se interpretó como una maniobra de presión para modificar las condiciones del contrato.
Cogersa respondió días después con un requerimiento para instar a la empresa a retomar el servicio bajo la advertencia de que, en caso contrario, se adoptarían las medidas oportunas para resarcir al Principado del daño causado.
El proceso de licitación del que resultó ganadora Vareser fijó unos precios que suman una facturación estimada de 4,4 millones de euros al año, y el contrato actual entró en vigor el pasado 1 de noviembre con una duración máxima de ocho años.
