En plena polémica por las medidas de movilidad sostenible implementadas en el barrio de La Calzada, los ciclistas gijoneses han querido hacerse visibles y revindicar el nuevo carril-bici y su derecho a circular con seguridad por la ciudad: “tenemos el convencimiento de que los cambios producidos, que ahora preocupan a algunos habitantes y comerciantes, pronto pasarán a normalizarse, como así ha ocurrido en el resto de la ciudad. Se trata de que todo el mundo pueda convivir”.
Convocados por Asturias con Bici, un pelotón de ciclistas urbanos reivindicaron este viernes “calles con más espacio y más seguridad para sus habitantes y, también, con una menor contaminación y ruido” con una marcha a través del carril bici de La Calzada, todavía en construcción.
“Unas calles que todo el mundo pueda disfrutar, no solo la gente que conduce o aparca su coche” señalaron en un comunicado en el que recuerdan que “cuando se abre un carril bici, no se cierra la calle al tráfico: se abre también a que otras personas también tengan la opción de circular con seguridad y tranquilidad por la zona”.
El veneficio de algunos usuarios de la bici, entre los cuales me incluyo, no debería implantarse en perjuicio de vecinos y comerciantes. Es el ayuntamiento quien debe planificar soluciones ajustadas que respeten todas las sensibilidades, y no imponer planteamientos traumáticos y poco realistas confiando en que, con el tiempo, y la debida “reeducacion” de los díscolos, el tema se olvidará. Por favor, no somos corderos imbeciles.
Dudo mucho que la haya convocado dicha asociación. En su web no viene la convocatoria y el que haya sido un acto de acoso a un farmacéutico de La Calzada tampoco parece acorde al espíritu de la misma