El diputado de Podemos Daniel Ripa ha argumentado este jueves “motivos éticos e ideológicos” para explicar su rechazo a “cobrar sin trabajar”, después de que la Junta General del Principado aceptara su petición de renunciar a cualquier indemnización que le pudiera corresponder de la Diputación Permanente, cuya cuantía total a todos los parlamentarios durante este mes será de “entre 200.000 y 250.000 euros”.
El parlamentario de Podemos presentó esta semana la renuncia al cobro como miembro suplente de la Permanente, de la que a diferencia de la del Congreso y la de otros parlamentos autonómicos, forman parte los 45 diputados y diputadas de la Junta General.
“La Diputación Permanente no tiene actividad conocida, ni la ha tenido históricamente”, ha dicho Ripa, quien ha apuntado que la presencia de todos los diputados, en los casos en que estos no han renovado el acta, es de “difícil justificación”.
A su juicio, la Junta General tiene un “mecanismo anómalo”, ya que en vez de estar en la Diputación permanente un “pequeño grupo de diputados de retén, por si pasa algo”, mantiene los 45 en un órgano que “no se ha reunido nunca, con la única intención de mantener el sueldo entre el 28 de mayo y el 26 de junio”.
Ripa ha recordado que el pasado mes de abril dirigió un escrito dirigido a la Mesa del Parlamento en el que anticipó su intención de renunciar al cobro a partir del 28 de mayo, en una decisión sin “precedentes” en el parlamento asturiano.
En 2015, cuando se produjo la entrada en la Junta General de Podemos, Ripa y los otros ocho diputados de la formación morada, rechazaron recibir las asignaciones como parlamentarios hasta el momento en que se constituyó la Cámara.
