El franquismo transformó en "defensores de Oviedo" a los golpistas que el 19 de julio de 1936 tomaron por sorpresa una ciudad con mayoría de izquierdas.
La tía Lisa les pidió a los milicianos que la dejaran pasar por Peñaflor y ella siguió la ruta profunda de sus afectos desordenados a pesar de aquella guerra que no parecía que la afectara mucho