“No podemos enterarnos por la prensa de que se cancela San Mateo”. Desde La Folixaria, el chiringuito social impulsado por diferentes movimientos juveniles, se muestran comprensivos con la situación excepcional de este San Mateo, pero piden al Ayuntamiento diálogo para abordar alternativas seguras a las fiestas de la capital asturiana, que con los planes del gobierno de Alfredo Canteli perderán todos los eventos al aire libre, incluyendo el pregón o el Día de América en Asturias. Mieres ha optado por un San Xuan sin aglomeraciones ni foguera , y en su lugar ha programado 10 días de conciertos al aire libre, con aforo limitado y medidas de seguridad, bajo el título “Esto nun ye San Xuan”. También al aire libre y con aforos limitados se desarrollarán la Semana Grande y el festival Metrópoli de Xixón, así como las fiestas de San Agustín en Avilés. Justo la vía contraria a la de Canteli en Oviedo/Uviéu eliminando todas las actividades al aire libre, tanto los grandes conciertos como los de pequeño formato, como la programación de músicas del mundo en la Plaza del Paragües, tradicional refugio de los que buscan un San Mateo más íntimo y tranquilo. En su lugar se optará por algunos conciertos en recintos cerrados, como los del Oviedo Rock, a celebrar en una sala de conciertos de la capital, una decisión chocante que contrasta con la opinión de los expertos, que consideran que el virus se transmite menos al aire libre, o con la propia programación de cine de verano del Ayuntamiento.

Este año desaparecen también de San Mateo las casetas del Paseo del Bombé. La decisión no ha gustado a los hosteleros e incluso una asociación tan bien relacionada con el bipartito como OTEA se muestra crítica con ella. Desde la principal asociación de hostelería asturiana se considera que se podrían haber buscado alternativas, y que “lo fácil es prohibir” en vez de ofrecer soluciones. Otra entidad en absoluto hostil al equipo de gobierno, pero disconforme con los planes de PP y Cs, es la SOF. La Sociedad Ovetense de Festejos, presidida por Felipe Díaz, muestra su sorpresa con la cancelación del Día de América en Asturias, que este año celebraría su 70 aniversario.

Los llamados chiringuitos históricos aún están consensuando una posición conjunta, aunque a priori comprenden que todo el mundo debe contribuir a evitar rebrotes del Covid19. Existe sin embargo también el temor entre ellos a que la pandemia sea la excusa perfecta para acabar con las casetas de los colectivos sociales y políticos, un modelo heredado del Oviedo/Uviéu de los años 80, que nunca ha gustado a las derechas. De los nuevos, los llamados “sociales”, La Folixaria, en un comunicado, señala que “entendemos perfectamente la situación social actual. También nosotros y nosotras lo hemos vivido, como todo el mundo, de primera mano. Además, en nuestro equipo muchas de las personas son estudiantes o trabajadoras de las ramas sanitarias”, sin embargo, el chiringuito de la Corrada del Obispo, apunta que desde las asociaciones que lo impulsan se estaba buscando un plan B que evitara aglomeraciones, y se opina que “una decisión de tal calibre no se debería tomar de forma unilateral y de espaldas a los agentes sociales que llevan tres décadas organizando de forma altruista y sin ánimo de lucro el núcleo central de las fiestas de San Mateo”. También PSOE y SOMOS Oviedo/Uviéu han pedido la continuidad de los conciertos al aire libre, con aforos limitados, tomando el modelo de otras fiestas asturianas. Sin embargo Covadonga Díaz, edil de festejos del PP, defiende su decisión y considera que esta es la forma más responsable de actuar teniendo en cuenta las condiciones sanitarias. Una posición que comparte Cristina Coto, de VOX, el único grupo político de la oposición que respalda la práctica suspensión de San Mateo 2020.