Cerca de cuarenta mujeres realizaron esta tarde el trayecto en Alsa entre Xixón y Uviéu para mostrar su solidaridad con Susana García, la conductora despedida que esa empresa de transportes se niega a readmitir. Las manifestantes (pensionistas, feministas, sindicalistas, militantes de organizaciones sociales…) exhibieron en el interior de vehículos durante el viaje carteles con la leyenda Susana readmisión ya y ofrecieron una rueda de prensa a su llegada a la capital asturiana, donde fueron recibidas por más de una treintena de personas.

Carmen Diego, sindicalista y trabajadora de ayuda a domicilio, ejerció de portavoz ante los medios de comunicación y señaló que Susana García es la única, entre 44 trabajadores despedidos, que a día de hoy aún no ha sido readmitida por la empresa y que la suya es la única sentencia en contra que Alsa ha recurrido. Destacó de esta trabajadora su “trayectoria profesional intachable, con un expediente laboral ejemplar” desde que empezó a trabajar en Alsa, hace diez años. Señaló también el hecho de que se trata de “una madre con dos hijos, al frente de un hogar monomarental” y que la situación que está sufriendo no sólo le afecta a ella, sino también a sus familiares. “Van a por la más vulnerable”, denunció.

Las manifestantes estuvieron acompañadas, tanto a la salida como a la llegada, por Cándido González Carnero, sindicalista de la Corriente Sindical d’Izquierda. Alejandra Tejón, portavoz local de Podemos Xixón, se sumó al viaje entre ambas ciudades. En la estación de autobuses de Uviéu, a la que llegaron a las cinco y media de esta tarde, fueron recibidas por más de una treinta de personas, entre ellas Daniel Ripa, diputado y secretario general de Podemos Asturies, y María Lluisa Nogueiro, portavoz local de Podemos Oviedo/Uviéu. Una pancarta con la leyenda Si tocan a una, nos tocan a todas les dio la bienvenida a la entrada de la estación ovetense y en la propia dársena en la que estacionó el vehículo en el que viajaban. Basta de regalar dinero público (112 millones desde 2016) a Alsa, que despide. ¡Susana readmisión!, podía leerse en uno de los carteles, firmado por Izquierda Revolucionaria.

Numerosos colectivos y entidades feministas, sociales, políticas y sindicales han mostrado su apoyo a Susana García, carreñense de 43 años de edad, y reclaman su reincorporación inmediata. El Tribunal Superior de Justicia de Asturias le dio la razón a esta trabajadora del volante en octubre de 2020 al declarar improcedente su despido. La empresa mantiene su negativa a readmitirla, sin que se conozca la motivación de esa actitud, si bien el movimiento de apoyo a la conductora considera que “estamos ante un claro ejemplo de discriminación de género, al tratarse de la única trabajadora que no ha sido readmitida”.