Carmen Saches, psicóloga de la residencia para personas mayores de L`Infiestu; Susana Villar, la presidente de la asociación de familiares de usuarios de dicho centro, y Rafael Palacios, diputado de Podemos, denunciaron ayer la situación de este centro, con cerca de 90 usuarios.
Denuncian, en primer lugar, el mal estado de las infraestructuras. Palacios explica que, hace tres años, se anunciaron 700.000 euros para arreglar las deficiencias, que de momento siguen sin resolverse. Cita, como ejemplo, que algunos de los baños tienen bañera en vez de ducha, lo que dificulta la accesibilidad de los usuarios y la labor de las trabajadoras.
En segundo lugar, critican que no se estén cubriendo las bajas por enfermedad, permiso o vacaciones, lo que genera una sobrecarga de trabajo para las empleadas. “Los puestos de enfermería y auxiliar de enfermería no se cubren adecuadamente”, asegura el diputado.
Además, con la pandemia se quitaron servicios, como el de peluquería, que aún no se han restituido. A todo esto se la suma la intención del ERA de prescindir de la psicóloga del centro.
Por todo ello, Podemos ha anunciado que llevará la cuestión al parlamento asturiano. El grupo morado presentará una solicitud de información para pedir explicaciones acerca de la supresión de la plaza de la psicóloga. También formulará una pregunta oral en la próxima comisión de Derechos Sociales y Bienestar, que se celebrará en febrero.