“Llevamos dos años sin vacaciones, y tres meses sin cobrar”. Evaristo Sierra Crespo, actual jefe de La Asturiana, la antigua fábrica de caramelos afincada en Xixón y que cuenta hasta con 30 trabajadores y trabajadoras, lleva acumuladas varias denuncias por impagos y gestiones fraudulentas. En Nortes, hemos hablado con Nacho Gutiérrez, trabajador de La Asturiana, quien nos ha relatado la historia.

Este empresario adquirió el mando de la fábrica en 2003. Sin embargo, en los últimos tiempos, los trabajadores han visto que los problemas se han ido acumulando: “llevamos cerca de 6 años cobrando la mitad del sueldo”. El procedimiento comenzó a ser el siguiente: a mediados de mes, los trabajadores cobraban la mitad del sueldo, y la otra mitad, se iba acumulando en los meses siguientes. “La contabilidad la lleva él, sin transparencia ninguna”, denuncia Nacho, quien veía que, desde su puesto en fabricación, cada 15 días desaparecían cantidades de glucosa y azúcar, “pero no sabemos hacia dónde iban esas fugas. Veíamos cosas raras”.
“Llevamos cerca de 6 años cobrando la mitad del sueldo”
Nacho asegura que la fábrica funciona. No obstante, en los últimos años, Evaristo Sierra Crespo les aseguró que la empresa iba mal económicamente, ya que había posibilidad de que “la empresa cerrase”, y que era necesario “renunciar a las pagas extraordinarias” de julio y diciembre, así como las pagas de beneficio. En un principio, el jefe les dijo a los trabajadores que esta situación no se alargaría más de un año. “Al final, echamos cuentas de las pagas que no cobramos, la antigüedad que nos congeló… En total, se ahorró un millón de euros a nuestra costa”. Además, desde que llegó a la empresa este jefe, hubo que esperar hasta 2019 para que los trabajadores tuviesen el convenio que les correspondía.
“En total, se ahorró un millón de euros a nuestra costa”
Actualmente, los trabajadores acuden todos los días a la fábrica, ya que han visto cómo su propio jefe ha ido sacando maquinaria de la fábrica. Sin embargo, desconocen su paradero. “Tenemos fotos de camiones llevándose la maquinaria, y luego nos culpó de que éramos nosotros quienes queríamos cerrar la empresa”. Además, han visto cómo su jefe ha pagado con dinero en B a otras personas para que hagan trabajos puntuales en la fábrica. Las sospechas han conducido a estos trabajadores hasta Extremadura, lugar en el que este jefe tiene una empresa que fabricará para él caramelos, y así, poder distribuirlo paralelamente. Esta empresa, además, es utilizada para desvío de facturas de la producción de La Asturiana. “Dudamos mucho de la legalidad de esto, teniendo en cuenta de que nosotros estamos en ERTE”.

Como bien informa Nacho, estos trabajadores están actualmente en Expediente de Regulación Temporal de Empleo. Las razones del empresario son las bajas ventas que tiene la fábrica, sobre todo en verano. Esto choca con algunos eventos, como uno sucedido en 2017. En ese año, los trabajadores estuvieron hasta dos meses sin cobrar. De repente, Evaristo Sierra Crespo, que había estado diciendo que tenía que cambiar de coche porque no funcionaba bien, “apareció un día con un Mercedes de 80 o 90 mil euros. Y, mientras tanto, nosotros sin cobrar”. Además, los trabajadores han tenido que salvar en varias ocasiones los platos rotos por este empresario. En un momento dado, no llegó a renovar con el SEPE los ERTEs de sus empleados, quienes tuvieron que devolver hasta 7 meses de nóminas que les había pagado el propio SEPE.
“Apareció un día con un Mercedes de 80 o 90 mil euros. Y, mientras tanto, nosotros sin cobrar”
Tras varios escándalos de este tipo, ha habido personas que, a título particular, han denunciado estos hechos graves. Por el momento, han embargado varias máquinas, aunque aseguran que son las más antiguas y sin uso, pues las nuevas ya las ha trasladado. “Nos debe cerca de 200.000 euros a todos los trabajadores, pero él dice que no lo paga porque no tiene dinero”. Este jefe también ha intentado pedir créditos, concretamente al IDEPA (Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias), “pero nos sigue engañando y dando excusas. Esto ha sido como una bola de nieve, y ha ido cada vez a más. Y ya estamos hartos”.

Hasta ahora, UGT ha sido el sindicato que se ha ocupado mayoritariamente de este asunto. “Nos han dicho que toca esperar, a ver si lo meten en concurso de acreedores”, aseguran los trabajadores, quienes también han denunciado esto a inspección de trabajo, aunque todavía siguen a la espera. La prensa asturiana, que en un principio dio cuenta de este caso, tampoco le ha dado seguimiento. “Estuvieron cuando nos manifestamos frente a la fábrica hace poco, pero nada más”.