Reunión a solas e intercambio de bolsas en la nave municipal de obras de Noreña

Una cámara de seguridad grabó a Pelayo Suárez, concejal de Urbanismo del concejo, junto a Manuel Díaz, un empresario que es adjudicatario habitual del ayuntamiento y que el año pasado quiso poner una planta pirolítica en Noreña

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Bernardo Álvarez
Bernardo Álvarez
Graduado en psicología y ahora periodista entre Asturias y Madrid. Ha publicado artículos en ABC, Atlántica XXII, FronteraD y El Ciervo.

NORTES ha tenido acceso a unas imágenes de una cámara de seguridad de la nave municipal de obras de Noreña en las que aparecen Pelayo Suárez Colunga, concejal de Urbanismo y Obras del partido Independientes Por Noreña (IPÑ) y el empresario constructor Manuel Díaz, que es además amigo personal del concejal, como este reconoció en un pleno.

Las imágenes son del viernes 4 de diciembre de 2020 y transcurren entre las 15:09, cuando se ve al concejal esperando en una especie de vestíbulo, y las 16:18, cuando se monta en su coche portando dos bolsas de papel que el empresario le había entregado en una sala o despacho. Tal y como se ve en las imágenes, Díaz llega al vestíbulo hacia las 15:17 portando sendas bolsas, y el concejal le invita a pasar a su despacho.  Ambos entran a las 15:17 y no salen hasta las 16:16, siendo ahora el concejal quien se marcha con las dos bolsas.

Suárez, contactado por NORTES, asegura que no hay nada que ocultar sobre ese encuentro y que responde a su actividad ordinaria como concejal. Según Suárez, se trata de comida del Bar La Plaza, de Noreña.

Las empresas de Díaz, así como otras de familiares directos o personas cercanas, son contratadas habitualmente por el ayuntamiento de Noreña. Igor Finca, concejal del PSOE, denunció en un pleno del pasado mes de marzo que las empresas de Manuel Díaz, de su hijo Ignacio Díaz, y de Esteban Díaz habían facturado en lo que se lleva de legislatura, sin contar el último trimestre de 2022 ni el primero de 2023, más de 150.000 euros en contratos menores.

Una empresa del hijo de Díaz fue la que solicitó el verano pasado la licencia para instalar una planta pirolítica de quema de plásticos industriales en la localidad.  La solicitud de licencia se registró el día 27 de julio, el 12 de agosto la firmó el concejal Pelayo Suárez, y el 25 de ese mes de publicó en el BOPA y en el tablón de anuncios del ayuntamiento. “El ayuntamiento quiso tramitarlo a lo callado, pero la gente se enteró por una nota de la Coordinadora Ecoloxista de Asturias”, cuenta una de las personas ya citadas, “los vecinos salieron a manifestarse, empezaron a poner alegaciones y tuvo que cancelarse”.

Manuel Díaz es también, a través de otra de sus empresas, el director de obra contratado por Ferrovial para la sustitución del alumbrado público de Noreña. La obra fue recepcionada hace más de dos años pero desde entonces, denuncian la oposición y los vecinos, no ha dejado de haber apagones y problemas con el alumbrado. Los partidos de la oposición denuncian también que la recepción de la obra fue firmada por el concejal Pelayo Suárez, pero no por el responsable municipal de la oficina técnica.

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