El presidente en funciones del Principado y candidato a la reelección, Adrián Barbón, ha asegurado este martes que el entendimiento que busca con IU-Convocatoria por Asturies para conformar un “gobierno fuerte, estable y de progreso” es compatible con una “permanente disposición al diálogo” con otros grupos parlamentarios, pero también con sindicatos, empresarios, ayuntamientos o la Universidad.
Durante el discurso con el que se ha iniciado hoy en la Junta General del Principado el debate de investidura del presidente asturiano, Barbón ha planteado también la necesidad de fortalecer las alianzas alcanzadas con otras comunidades autónomas para abordar asuntos como el corredor del noroeste, la macrorregión atlántica, la financiación autonómica o el desafío demográfico.
Al igual que en la legislatura pasada, “ésta volverá a ser ejemplo de esa voluntad permanente de consenso”, ha afirmado Barbón, quien ha mostrado su confianza en que esa disposición sea correspondida por el resto de formaciones y en que Asturias siga siendo un “refugio frente a la crispación, un oasis de diálogo”.
Cercanía y audacia serán también características de un gobierno que, según ha añadido, antepondrá la lealtad con Asturias a cualquier otra consideración, como ya demostró la legislatura pasada ante el Ejecutivo central en cuestiones como la protección del lobo, la defensa de la industria o la mejora de las comunicaciones.
Barbón, ha afirmado este martes que la comunidad se encuentra “en cabeza” de la “revolución verde” y ha adelantado que el propósito de su Gobierno en la nueva legislatura será el de “afianzar Asturias en el buen camino que ya recorre”.

“Esta vez no vamos con retraso, desfasados respecto a regiones españolas o europeas, sino en cabeza”, ha defendido Barbón en su discurso en la primera sesión del debate de investidura en la Junta General del Principado, donde ha remarcado que “las evidencias no se cuestionan”.
Para ilustrar “las buenas perspectivas económicas de Asturias”, Barbón se ha referido a las inversiones de ArcelorMittal, los contratos adjudicados a la fábrica de armas de Trubia, la puesta en marcha de la regasificadora de El Musel, los niveles de paro (los más bajos desde octubre de 2008) y de empleo (los más altos en doce años), o los récords de exportaciones y de cifras turísticas.
“La transición ecológica se ha convertido en un revulsivo inversor, en una plataforma de renovación y despegue económico”
Tras reconocer que hay problemas como la baja tasa de actividad, el escaso tamaño de muchas empresas o la falta de adecuación de oferta y demanda laboral, ha insistido en que la transición ecológica, que en 2019 se presentaba como “una amenaza letal” para la industria, “se ha convertido en un revulsivo inversor, en una plataforma de renovación y despegue económico”.
El presidente en funciones del Principado y candidato a la reelección, Adrián Barbón ha pedido al conjunto del parlamento autonómico que afronte las necesidades más apremiantes de Asturies y sea capaz de alcanzar “acuerdos este mismo año” sobre el reto demográfico, las cercanías ferroviarias, el Corredor Atlántico y financiación autonómica.
También ha ofrecido alcanzar “cuanto antes” un acuerdo por la igualdad que blinde los avances acumulados en el que se reconozca expresamente la violencia machista y que garantice el mantenimiento de fondos y recursos para combatirla.
En su oferta, que hará extensiva a todos los ayuntamientos, plantea también mantener las políticas de igualdad en marcha, fomentar el respeto a la diversidad sexual, mantener la red de casas de acogida, el centro de crisis para víctimas y todas las medidas desarrolladas con estos fines “para preservar una Asturias abierta”. Frente a las “fuerzas de la reacción o de la caverna”, quiere que su gobierno sea “dique y rompeolas a favor de la igualdad”.
Con ese fin ha anunciado que la Estrategia Asturiana para la Abolición de la Prostitución y la Trata se mantendrá esta legislatura, que habrá más recursos para la red de casas de acogida y el centro de crisis para víctimas de agresiones sexuales, y que actuará frente a la brecha salarial con un programa específico de apoyo al liderazgo femenino.
En el tramo final de un discurso en el que a lo largo de 80 minutos ha expuesto a la Junta General del Principado su programa de gobierno para los próximos cuatro años, Barbón ha incidido en que más allá de esta legislatura, su proyecto tiene el horizonte de una década, la de la década del cambio que está viviendo la comunidad.

“Ha llegado el momento de Asturias”, ha afirmado el presidente en funciones, que ha animado a dejar atrás “los viejos y añosos nudos de los tópicos” para poder “compartir audacia” y entre todos ser capaces de que esta región “aproveche esta transformación acelerada” y se atreva a “innovar, a tomar decisiones arriesgadas, a pisar terrenos aún no explorados”.
“Hoy, más que nunca, el miedo al cambio sería una condena para Asturias”, ha subrayado el candidato socialista, para quien es preciso también anteponer los intereses de la comunidad autónoma a cualquier otro.
Previamente, había señalado también que, a corto plazo, las acciones más inmediatas de su gobierno, en cuestión de semanas, pasan por la aprobación de la Ley de Impulso Demográfico en la primera reunión del Consejo de Gobierno, que se celebrará en Cangues d’ Onís, primera capital del reino de Asturies.
Antes de acabar 2023 también tiene previsto llevar al parlamento la modificación de la Ley de Montes, la Ley de Proyectos Estratégicos y la de Derechos de las personas LGTBI e iniciar negociaciones para un pacto contra la involución machista, la concertación social y el cuidado de la salud mental.
También solicitará una entrevista con el presidente que salga elegido de los comicios del 23 de julio y se pondrá en contacto con los presidentes de las comunidades autónomas vecinas porque “la política de alianzas es una necesidad y una fortaleza para Asturias”.