Está siendo una semana agridulce para Roberto García Carril, presidente de la Plataforma Vecinal contra las plantas de asfalto y de hormigón por un Oviedo Saludable (PVOS), y para todos los vecinos del valle de Los Caldas. Son ya más de tres años luchando contra la instalación de una planta de asfalto donde ahora funciona Canteras Mecánicas Cárcaba, propiedad de la multinacional Hanson, y asumen que todavía les queda un buen trecho por delante. En los últimos días, dos resoluciones judiciales contradictorias hacen prever que el camino será largo.
El domingo pasado supieron que el Tribunal Supremo admitió a trámite el recurso presentado por la plataforma, bajo el amparo de la Coordinadora Ecoloxista D´Asturies, lo que supone que no existe una autorización minera válida para los planes de la empresa. García Carril no oculta su satisfacción: “En 2020 el Tribunal Supremo rechazó el 85% de los recursos presentados, y el nuestro lo admitió. Pasar ese filtro es una noticia importante, porque sabemos que la van a mirar”. Pero dos días después, tras la euforia, llegó el jarro de agua de fría.
En otro de los pleitos en los que está inmersa la plataforma, este por la licencia municipal, Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº6 de Oviedo ha emitido una sentencia favorable a Hanson. La resolución tumba la decisión del ayuntamiento ovetense de denegarle a la empresa la licencia para instalar una edificación industrial donde ahora se encuentra la cantera. “Teníamos esperanzas de ganar esto, pero la juez falló a favor de Hanson”, lamenta García Carril, que anuncia que la plataforma recurrirá la sentencia.
Los técnicos municipales del ayuntamiento no han cambiado sus informes y siguen sosteniendo que Hanson no debería obtener la licencia. No obstante, la juez ha estimado más verídicos los informes aportados por el perito de la multinacional. La plataforma insta ahora al ayuntamiento a recurrir la sentencia, en un plazo de quince días, “en defensa de los intereses municipales”. Los partidos que componen el consistorio ovetense, PP y Ciudadanos, votaron en 2018 en un Pleno contra los planes de Hanson. La pelota está ahora en su tejado.