A la socialista Lucía Falcón le apasiona la cultura, apostando por que llegue a todos a través de las plazas de los barrios y pueblos de Oviedo. Falcón nació en 1983 y es licenciada en Historia del Arte por la Universidad de Oviedo. Compagina su actividad profesional como edil del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Oviedo con el desarrollo de proyectos artísticos y culturales.
Entre sus peticiones más recientes destaca una inminente línea de ayudas municipales destinada al sector cultural para paliar los efectos de la pandemia, colocar una placa en honor al poeta Antonio Gamoneda o cubrir las plazas de profesorado de la Escuela Municipal de Música. De todas ellas hablamos con Falcón.
¿Cómo describes el ambiente en el Ayuntamiento de Oviedo esta legislatura?
Mis compañeros y yo tenemos la sensación de que no hay ningún resquicio de poder para llegar a un mínimo acuerdo. Nuestro ánimo siempre es propositivo, constructivo, de tender puentes y la mano, pero siempre nos encontramos con un muro infranqueable. La ciudadanía lleva pasando un mal trago desde hace más de un año por la situación sanitaria y económica, y pensábamos que podíamos colaborar con el Gobierno en muchos aspectos, sobre todo sociales y de generar economía y proyectos, para que a futuro salgamos de una manera mejor, pero una vez más nos encontramos con la negativa y el rechazo a todas nuestras propuestas. Es frustrante, queremos llegar a un mínimo, pero no hay voluntad de negociación. En ocasiones el argumento es: “lo estamos trabajando”, “lo estamos haciendo” y todo los que nos proponéis, no lo vamos a aceptar, aunque sean cosas novedosas o que no tengan ellos en cartera. De manera formal y con el consenso de todos los grupos en las comisiones, es de negativa total.
Recientemente se aprobó una modificación presupuestaria de 1,5 millones de euros para actividades culturales…
A la oposición no se nos dio ningún dato específico de a qué se va a destinar ese millón y medio. Por ejemplo, en la última comisión el portavoz de Somos preguntó si podíamos dar ideas y si las iban a aceptar, a lo que fue respondido que sí y que sin problema, pero cuando fue mi turno, les dije que no es así, porque llevo presentando una serie de propuestas los dos últimos años en la Fundación Municipal de Cultura. Sin ir más lejos, cuando nos sumamos al proyecto de Asturias, capital de la poesía, yo dije que por supuesto, pero que lo teníamos que hacer con contenido, valorar los escritores y poetas. Me puse en contacto con La Corrada de la Poesía, los libreros, con clubs de lectura, con Proyecto Hombre, con asociaciones de vecinos, de músicos y de teatro, era un proyecto muy amplio para poner iniciativas en común con una periodicidad anual, pues eso no salió adelante y lo volví a presentar el año pasado y tampoco.
“Nuestro ánimo siempre es propositivo, constructivo, de tender puentes y la mano, pero siempre nos encontramos con un muro infranqueable”
¿Y el homenaje al poeta Antonio Gamoneda, nacido en Oviedo en 1931?
Es otra de las cosas que pedíamos, iniciativa de otros agentes culturales, ponerle una placa en la calle de Melquiades Álvarez número 25, la casa donde nació. Pero no vemos que vaya a realizarse, Gamoneda, Premio Cervantes en 2006, es ya mayor y la idea era poder hacerle el homenaje en vida. Conchita Quirós fue una de las que apoyaban esta idea y lo considera muy buen homenaje para este escritor tan enraizado a Oviedo.
¿Y cuál crees que sería la solución?
Veo muy difícil un cambio de actitud. El tema sería que se comenzase a negociar y que cuando llegue una proposición por parte de los partidos de la oposición el concejal de Cultura tuviese la iniciativa de hablar con nosotros y llegar a un acuerdo. Es una situación frustrante, pero por mi parte, pienso que con nuestras ideas y políticas estamos marcando un modelo de gestión, que a lo mejor no se podrá hacer ahora, pero más adelante sí. Y seguramente ellos cogerán alguna idea y se pondrán la medalla, pero lo que no quieren es que salga de nosotros.

¿Y cómo ves la situación en los centros sociales y bibliotecas de Oviedo durante la pandemia?
No se preocupan por nada de lo que ocurre en los barrios, todo tiene lugar en el centro. Nosotros presentamos un plan de emergencia con actividades al aire libre y descentralizadas, de tal manera que igual que se apoyó el comercio de proximidad, igualmente se puede potenciar pasar el tiempo libre y disfrutar de la cultura cerca de tu casa y de tu barrio y de tu pueblo. Hubo una serie de festivales con los que estuvimos de acuerdo, pero al hacer la valoración final, eran festivales exclusivos, para muy pocas personas. Nosotros apostábamos por más actividades en más lugares para llegar a más gente, pero nos respondieron que no se podía vallar y que era muy costoso, cuando en la plaza de la Catedral y de la Universidad sí se hizo. Es una excusa que no nos la creemos, porque recién salíamos del confinamiento, la gente tenía miedo, entonces igual tienes más éxito en los barrios, sin tener que coger transporte público.
“El Ayuntamiento no se preocupa por nada de lo que ocurre en los barrios”
Muchas familias necesitan hacer trámites en línea pero no tienen los medios suficientes…
En la Lila ahora abren desde las nueve hasta la una y hay gente haciendo colas, porque con solamente la mitad de los equipos habilitados se nota. Nosotros pedimos que en cada barrio se establezca un telecentro, ya sea en las bibliotecas o en centros sociales, para que la gente allí pueda hacer sus trámites. Incluso las familias con los críos porque muchas tienen que hacer cosas del colegio y no tienen los equipos suficientes en casa. También hay que recordar que muchos trámites del Ayuntamiento son a través de Internet, pero una parte de la población no tiene los conocimientos o recursos para hacerlos.
¿Y cómo están las cosas en la Escuela Municipal de Música?
En el pleno nos dijeron que se cubriría la plaza, sobre todo la del profesor de percusión, pero también es necesaria una plaza de lenguaje musical. Percusión llevamos reclamándola desde hace más de un año. El año pasado era oboe porque la profesora titular estaba de baja por maternidad. También pedíamos la habilitación de la plataforma digital, igual que en la Universidad Popular, que tampoco sabemos muy bien cuánta gente se ha inscrito este año, si ha tenido éxito o no, porque el comentario general es “lo quieren dejar morir”. Todos los servicios públicos nuestros se están dejando morir. Hay desidia, se está apostando por otro tipo de cosas, más de iniciativa privada, pero nuestros propios servicios, los más básicos, no los cuidamos.
“Todos los servicios públicos nuestros se están dejando morir”
Ahora una pregunta que creo que te harán mucho: Nombre franquistas vuelven a las calles de Oviedo…
Es horrible. Yo, por ejemplo, escribí un artículo sobre Gloria Fuertes que que está ahí en el barrio donde yo vivo, pero también la de García Lorca y representaban a calles de escritores, de la cultura, del conocimiento, de la de la innovación en aquel momento y que volvamos a esto otra vez es muy rancio, es como volver al pasado y a recordar todos esos tiempos oscuros. Y no entiendo muy bien cómo se puede actuar así. Todo esto es consecuencia de un sectarismo que tiene este gobierno de destruir o de minusvalorar lo que se hizo en el pasado mandato de izquierdas.
¿Y la plaza de toros?
Llevamos una propuesta de que se redujese la protección para que Patrimonio te permita hacer más actuaciones. Es que este tema ya lleva allí desde que yo lo estuve la primera vez en el Ayuntamiento, o sea, desde los años 80. Se conoce que presentaron un proyecto al Principado, pero son de estas cosas que se habla y se habla. Hay ejemplos en en otras ciudades de transformación de plazas de toros en lugares multifuncionales, para cultura, para deporte, para espectáculos… Es curioso porque todos estos grandes proyectos, todos tienden a lo cultural.