Pulgu no existía aún, como perro, ni como idea artística, cuando conocí a Nel Amaro un día de octubre de 1992 en la capital del rei-no. Ese día Nel estaba a punto de iniciar una nueva y curiosa carrera de performer en el segundo FIARP (Festival Internacional de Arte Raro y Performance),cuando ya tenía un nombre como poeta y autor literario. Ese nuevo camino artístico de Nel es para muchos lo mas significativo y original de su trabajo, aunque para muchos otros, quizas muchos mas, lo relevante de Nel Amaro es su obra literaria… tiempo habrá para dilucidar eso, yo sólo lo menciono para dar una pincelada de su polifacética personalidad mientras barro para casa; la casa del performer y del artista postal, donde Nel brilló y sorprendió.
“Teoría de la ociosidad”, la primera acción de Nel Amaro, consistio en sentarse frente a una pequeña mesa plegable con las mangas de la camisa arremangadas y los brazos extendidos, e ir doblando el antebrazo lentamente en una mezcla de pulso y toma de la presión arterial. No recuerdo que fumase, pero en la foto que tomé de esa acción es bien visible sobre la mesa, como único objeto, un cenicero redondo de aluminio con un cigarrillo. También decía alguna cosa repetitivamente que ahora tampoco recuerdo, aunque si me quedó gravada su forma de hacer; sencilla y directa.
“Me quedó gravada su forma de hacer: sencilla y directa”
En las baldosas del suelo se podia ver, oler y palpar la patina grasa de materias diversas que nos acompañaría despues en mil lugares “undreground”; una grasa que evoca la que el mistico Joseph Beuys tantas veces usaría en sus acciones y instalaciones; grasa bendita y aurática entonces; artística, caramba!. Entraron por descuido, en el encuadre de la foto que ahora miro para rememorar ese dia, un par de bolsas proletariat de ule gris y rojo con ribetes de refuerzo blancos. Cuando llegó la ocasión de publicar dicha foto, me di cuenta que era mucho mejor dejar esos pequeños rombos de color a la vista, suprematistas y excéntricos a la manera Amaro. Dentro de la imagen son un “ruido visual” pero también un signo de oficio; la famosa bolsa descuidada del performer donde tener a mano los gadgets y materiales a usar; la antítesis escenica del mago.
Nel con su perro Pulgu.
Pocas horas antes de su debut, Nel se encontró con una circunstancia bien curiosa; tener que ordeñar una mujer, la performer Marta Vives, que representando una vaca, actuó desnuda y a cuatro patas, ligeramente cubierta por la espalda con una piel sintetica que por lo demas dejaba a la vista sus tersos muslos y un par de bellos pechos de los que Nel tirava suave y ritmicamente según el guion. Yo hacía de discóbolo-hombre-estatua también desnudo y con una soga al cuello que controlaba la Vaca Marta. En mi caso fue un intercambio; yo hacia de figurante en la acción de Marta y ella me ayudaba en mis intervenciones urbanas. En el caso de Nel fué un “aquí te pillo aquí te manto”, tan propio del mundo de la acción, al menos en esos tiempos. Marta Vives disponía de otro Ordeñador Voluntario, pero, pocos minutos antes de comenzar, entró en el café donde nos encontrabamos una mujer muy agitada, con un gin tonic en la mano. Cuando llegó frente a nosotros se bebió el gin tonic de un trago y tras gritar “tu no ordeñas a esa!” se desmayo cayendo aparatosamente sobre el suelo del bar. Marta sin inmutarse miró a su alrrededor y vio a Nel que observaba la escena.
El trabajo de Nel Amaro se podría situar estéticamente dentro de las coordenadas que se marcarón en aquel FIARP 2; una base de austeridad minimalista en la relización, espiritu de cazador-recolector “aquí te pillo aquí te mato”en los aspectos practicos de la preparación, desbordamiento humano, propio y ajeno, en los temas y un poco de “grasa-Beuys” y bolsa proletariat de ule. Ese encuentro tambien fue la base de una incipiente red de colaboranción entre artistas de acción que queríamos auto-organizarnos. Nel enseguida destacó con sus peculiares envios de arte postal, inmediatos y salvajes, poetico-anti-poeticos y políticos. Sus fotocopia-acciones eran verdaderamente sorpendentes, un ejemplo de las posibilidades de un arte portal, en declive desde la aparición de internet. Un día por ejemplo, me llegó una fotocopia doblada en cuatro partes que conntenía una goma de borrar Milan 430 de color verde claro, pegada brutalmente con un celo y la frase; POEMA-ACCIÓN / Esta acción dura / una fracción de segundo / tiempo de sobra para…: / BORRAR LA MEMORIA. (El subrrayado es suyo, la cursiva mía).
Las remotas montañas de Turón fueron famosas en el mundo del arte de acción, primero por sus envios postales y después por los Encuentros de Pola de Lena. De esas montañas bien verdes y bien negras, surgió el Arte Excéntrico en colaboración con Abel Loureda. Cuando el tandem cesó su actividad, Nel miró a su alrrededor y vió a su Perro Pulgu al que ipsofacto convirtió en perro Situacionista, una de los desdoblamientos de personalidad mas originales en el mundo del arte desde Rrose Sélavy.
“Las remotas montañas de Turón fueron famosas en el mundo del arte de acción”
Pulgu hacía acciones, publicaba su propio boletín y emitía todo tipo de comunicados. Gravó discos de ladridos y gruñidos y se extendió por todas partes con su mascara-pulgu-de-fotocopia enviada por correo portal y e-mail, emulando la omnipresencia de la máscara de “Anonimus”; bueno esto último es un poco exagerado, digamos que es una verdad poética… Pulgu solo tuvo un competidor, también promocionado por Nel Amaro, el hombrecito o los hombrecitos de Clic de Famobil. Fue la irrupción de Nel en el ciberespacio. Los envíos postales se multiplicaron por cuatro con el soporte digital, salto de la fotocopia-acción en B/N a la foto acción a todo color y el video-clip-acción.
Nel Amaro y Joan Canellas. Foto: Teresa Ramírez.
En el siglo XXI Nel se alejó de los sinsabores del artista-gestor para volcarse plenamente al arte popular, es decir, un arte de acción directo, irónico y seco o semi-seco, que desarrollaba incansablemente tanto en chigres y festejos populares como en centros culturales. Aunque bromista y accesible, me parece que Nel siempre fué un solitario radical, que como todo solitario solo se fía de los perros, en este caso Pulgu, Perro Situacionista. Visto en perspectiva me sobrecoge recordar sus acciones vienesas (acciones extremas) engullendo dos polvorones, después de lo cual declaraba ser diabético. En fin, que a la postre fue mas vienés que los vieneses: ¡El muy cabezón!. Esta Semana de Les Lletres Asturianes dedicada a su obra Nel excusa su presencia, pero nos manda miles de poemas visuales, de acción, video-acciones, manifiestos y proclamas; tenemos Nel Perruno Situacionista “pa rato, ai es Na!”.