El martes pasado, se celebraron las elecciones sindicales en la Empresa Municipal de Aguas de Gijón. UGT se impuso con 3 delegados, CCOO y USIPA obtuvieron 2, mientras que CSI y CSIF lograron un asiento cada uno.
Pero estos días, la atención en la EMA está lejos de esta cita electoral y de los resultados cosechados por cada sindicato. La CSI ha denunciado la vulneración de la confidencialidad de los datos personales de los aspirantes al último proceso selectivo de la empresa.
En octubre UGT inició acciones judiciales cuestionando los resultados de dicho proceso, solicitando la repetición del ejercicio práctico o, en su defecto, la anulación de las bases de la convocatoria desde su redacción. Hasta aquí lo normal en casi cualquier proceso selectivo. El escándalo saltó cuando desde este sindicato se procedió a demandar a todos y cada uno de los aspirantes en los juzgados, aportando el nombre, DNI y domicilios de todos los aspirantes, tanto de los contratados como de los que quedaron en la bolsa de empleo, sin que se sepa el modo en que accedió a dicha información.
“Desde hace ya unos años la CSI viene denunciando irregularidades en la gestión y dirección de la empresa con el beneplácito de sindicatos afines al PSOE como UGT”
Sin embargo, durante el proceso de selección los datos no fueron publicados, algo que el comité de empresa exigió, al entender que privaba de toda garantía la convocatoria. La dirección de la EMA dejó sin respuesta dicha petición. Ante esta situación, para la CSI resulta revelador el hecho de que UGT haya podido acceder a esos datos: “para nosotros, esta utilización de los datos podría implicar una clara vulneración de la Ley Oficial de Protección de Datos en beneficio de dicho sindicato”.
Desde hace ya unos años la CSI viene denunciando irregularidades en la gestión y dirección de la empresa con el beneplácito de sindicatos afines al PSOE como UGT. Lo que ha derivado en cambios de la gerencia, reestructuraciones de los servicios, aumento de plantilla o denuncias como la llevada a cabo en la actualidad donde se intentan proteger los derechos a la intimidad de los trabajadores afectados.
Hace cinco años esta labor de denuncia provocó que CSI obtuviera, por primera vez, representación en el comité de empresa de la EMA. Desde entonces, desde CSI se denuncian constantes irregularidades e incumplimientos de convenio