El Llano (Quirós) vuelve a ser este sábado el marco perfecto para el III Encuentro de Mujeres Escaladoras que organizar el club de montaña La Muyerada tras dos años de parón pandémico y que acogerá a cerca de 150 aficionadas tanto de Asturias como de las comunidades autónomas limítrofes. Una jornada de convivencia que contempla charlas y talleres formativos, la proyección de dos audiovisuales y música en vivo.
El evento cumple uno de los objetivos fundamentales de La Muyerada, que es dar formación para procurar autonomía y autosuficiencia en la montaña a las aficionadas de esta práctica deportiva en sus diferentes vertientes (escalada, alpinismo y nieve), así como en primeros auxilios y orientación. “Siempre hemos notado una gran demanda de actividades de este tipo, actividades donde nosotras seamos las protagonistas y tomemos las decisiones creando un ambiente de fraternidad lejos de la competición y la agresividad”, explica Inés Rodríguez González, responsable de formación en relación al encuentro.

Así cuentan con profesionales titulados para la impartición de los talleres que desarrollarán a lo largo de la jornada, que comenzará a las 09.30 horas con una ruta senderista a cargo de la geóloga Luna Adrados desde El Llano hasta el collado de Aciera. Una ruta donde les enseñará “a leer el paisaje desde el punto de vista geológico sabiendo los tipos de roca que tenemos, lo que es esperable. La idea es entender dónde se forman las fuentes y poder interpretarlo”, explica la experta. A partir de las 10.00 de la mañana tendrán lugar, en paralelo, los talleres de meditación por Paula Menéndez y de escalada iniciación y avanzado con los guías de montaña Ángel Castro y Fernando Calvo.

La sesión de tarde, desde las 16.00 horas, contempla nuevos talleres de escalada y de yoga, en esta ocasión con Arancha Sánchez. El programa incluye sendos talleres infantiles en sesión de mañana y de tarde: el primero de ellos con la monitora de escalada indoor María Saro y el segundo con Luna Adrados, una de las novedades en esta edición, según señala Inés Rodríguez. Con ellos se busca “facilitar la conciliación”, aunque el principal objetivo del evento “siempre ha sido crear redes entre mujeres que aumenten sus posibilidades de salir a la montaña en un entorno donde se sientan cómodas, dueñas de sus decisiones”.
“Además de esto, nos gustaría ofrecer referentes femeninos en los que poder vernos reflejadas y que den alas a nuestras aspiraciones deportivas y de ocio, así como visibilizar el papel de la mujer en este mundo y dar la oportunidad de tomar contacto con la escalada y la montaña a aquellas mujeres que, por diferentes razones, no la habían tenido”, añade la montañera. En esta línea, y además de esas redes, el programa contempla la proyección de ‘Historia de la escalada femenina’, presentada por su director Jaime Murciego, y la película boliviana ‘Cholitas’, que recoge la ascensión al Aconguaga del grupo de mujeres guías de montaña conocidas como las cholitas escaladoras.

Además de la cena de confraternización y el sorteo de productos cedidos por las diferentes marcas y entidades colaboradoras que ayudan a la financiación del evento, la nota musical la pondrán Mariajo Baudot y Silvidos y Gemidos. Aunque las actividades están dirigidas a mujeres, también se acepta la inscripción de hombres que recibirán el pack de bienvenida y podrán participar tanto del sorteo como de las actividades de ocio.
Gran aceptación
“Desde la primera vez que celebramos el encuentro hasta hoy hemos tenido siempre una gran acogida entre la comunidad de montañeras, no solo asturianas, sino también de autonomías limítrofes, como Galicia, Castilla y León o Cantabria”, apunta Rodríguez González. Una buena manera de “estrechar lazos, conocernos mejor y disfrutar de lo que más nos gusta en el mejor ambiente posible. Yo tengo una hija de 9 años y me encanta poder llevarla a este tipo de actividades donde pueda sentirse parte activa y disfrutar del ambiente que se crea”.
La Muyerada, que cuenta con unas 120 socias, ofrece diferentes formaciones a lo largo de su programación anual, un aspecto que ha ido tomando impulso dentro de la organización, como explica la responsable de formación: “hemos notado una gran demanda de talleres y cursos tanto de escalada como de actividades invernales, orientación y primeros auxilios. Muchas de nuestras socias hacen actividad en la montaña de forma regular, pero les gustaría sentirse con más seguridad para salir con autonomía y contra esa falta de confianza en nosotras mismas es contra lo que tratamos de luchar a través de la formación y la adquisición de más experiencia en la toma de decisiones”.
No en vano señala la cantidad de veces que ha oído “ya era hora de que se crease un grupo así” y, aunque agradece a los guías con los que habitualmente trabaja el club en sus formaciones, señala la carencia de tituladas femeninas “que sirvan de referente a nuestras socias, pero lamentablemente en Asturias aún queda camino por recorrer en este sentido”.

La geóloga Luna Adrados es la primera vez que participa en el encuentro y señala que “me parece una iniciativa estupenda. Aúnan a gente con la misma afición con la formación”, algo básico para saber “por dónde se mueven. La montaña no es solo salir a hacer una actividad, sino que se empieza a tener interés en saber qué hay detrás de la montaña que se escala. Y eso lo noto mucho en las últimas ediciones de festivales de montaña y demás: cada vez se cuenta más con iniciativas como la mía, donde está presente la geología”.
Adrados considera que “se debería tomar nota de este encuentro, organizado por y para mujeres con una sensibilidad acerca del tema de la conciliación, con talleres en paralelo para que las madres también puedan disfrutar. Que tomen nota en otros ámbitos”. Y, de paso, también contribuye a la formación, desde un lugar lúdico, de los y las más pequeñas, en su caso centrado en los ríos, su relación con los manantiales, donde los llevará hasta la fuente del Ruiseñor para ver distintas aspectos relacionados con el agua, llevando a cabo un pequeño experimento con sedimentos traídos del río para que vean cómo los organiza el agua”.
Por su parte, Arancha Sánchez señala que el nivel de las clases es adecuado para todas, adaptando la práctica en función de si existe algún tipo de limitación física. “La práctica al aire libre y en un paraje tan bonito siempre estimula y presta mucho más q si lo hiciéramos en un espacio cerrado. Así que, en general la sensación que deja la práctica de yoga es agradable: músculos elongados, cuerpo abierto, oxigenado y mente centrada y en calma”, algo muy en sintonía con la escalada, dos deportes que se compaginan a la perfección. “Y personalmente ¡un gusto poder impartir las clases de yoga en este evento y colaborar con todas!”, añade la monitora de yoga.
Veterana es la monitora de meditación y socia de La Muyerada, Paula Menéndez, que en estas ediciones ha aportado su granito de arena, como ella misma explica, con un taller de meditación guiada: “a mí me ha aportado mucho en mi vida, y es mi pequeña contribución con esta actividad”. Además es la encargada de gestionar la parte musical y audiovisual, apostando este año por un plantel repleto de mujeres y que, en el caso de la música, son asturianas.

“Este encuentro es una experiencia muy bonita, para mí ha sido muy emocionante participar cada año y ver cómo va creciendo teniendo en cuenta que se organiza desde el club y todo lo que hacemos es por amor al arte de las socias. Aquí sí que me gustaría destacar esa implicación del equipo, y que todo fluye de una manera muy orgánica, con mucho esfuerzo y trabajo, y con una gran satisfacción final en medio de un gran ambiente y una energía muy positiva que se ha creado en estos años”.
El Llano se convierte este fin de semana, una vez más, en la capital de la escalada en femenino.