El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha avanzado este martes que acatará la decisión del Tribunal Constitucional, aunque no la comparta, pero también que el Ejecutivo adoptará “cuantas medidas sean precisas” para poner fin al “injustificable” bloqueo del Consejo General del Poder Judicial y del Constitucional y que se cumpla “la voluntad popular expresada libremente en las elecciones”. Un bloqueo del que ha culpado al PP en un intento por mantener una composición del Consejo y del TC afín a sus intereses después de haber perdido las elecciones, y que ha llevado a dejar sin efecto una votación en el Congreso de los Diputados, algo que ha considerado “sin precedentes” en España y en Europa.
Sánchez ha expresado esa intención en una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa tras la decisión del TC, que ha paralizado la tramitación parlamentaria de la reforma judicial impulsada por los partidos del Gobierno ante la negativa del PP a llegar a un pacto.
El jefe del Ejecutivo, que no ha precisado cómo actuará a partir de ahora, ha apelado a la serenidad, si bien ha comprendido la “indignación de los demócratas”, y ha garantizado que se cumplirán tanto las leyes como la Constitución.
