“Se han cargado los proyectos que podrían acercar Oviedo a una gran ciudad europea”

Ana Taboada valora la gestión del bipartito, y aboga por un entendimiento de las izquierdas carbayonas para construir la alternativa a un gobierno PP-Vox.

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Andrés Illescas
Andrés Illescas
Es periodista.

Ana Taboada Coma (Oviedo/Uviéu, 1972) llega al final de su trayectoria en la política local, justo cuando cumple cincuenta años. Justo resta uno para las próximas elecciones municipales, en las que se apartará, dando paso a nuevos liderazgos en Somos. Relativamente satisfecha con los cuatro años en los que formó parte del gobierno y preocupada por la deriva de la ciudad durante el presente mandato del PP, hace balance de años convulsos para Nortes.

¿Cómo afronta su último año en el Ayuntamiento?

Toca hacer un repaso de lo que ha sido este gobierno bipartito. Preparar ese resumen de un gobierno fallido, que no ha cumplido ni con su propio programa. Eso nos servirá para explicar a la ciudadanía como un gobierno llega al Ayuntamiento simplemente para favorecer unos intereses concretos y no el bien común. Frente a eso, nosotros seguiremos yendo a los barrios y a las distintas zonas del concejo de Oviedo para conocer cuales son las necesidades reales.

¿Consiguen hacer que este mensaje suyo realmente cale en los vecinos?
Tenemos una dificultad importante, que es la comunicativa. Es algo que suele pasar a la oposición y sobre todo a determinados grupos políticos no muy queridos por los medios de comunicación. Muchas de las cosas que denunciamos nunca serán contadas, como decía aquella película. Nos toca hacerlo de manera alternativa, en directo, con la gente y poco a poco. La política ahora es de espectáculo, de grandes titulares y basada en las pasiones y eso no es lo nuestro.

Dice que el actual gobierno favorece unos intereses concretos, ¿a cuáles se refiere?
Buscan favorecer a una determinada asociación hostelera. Me remito a dos cosas muy concretas. Desmantelaron las fiestas populares de San Mateo para favorecer a esa asociación y han dejado en una situación alegal o de inseguridad jurídica las terrazas. Entendíamos en un determinado momento que, con eso, se favorecía al sector hostelero, pero ahora mismo, pasado ese momento, no sabemos si se está cumpliendo la normativa. Tenemos algo que nunca había pasado en este Ayuntamiento, un concejal dedicado exclusivamente a la hostelería.

“Desmantelaron las fiestas populares de San Mateo para favorecer a una asociación hostelera”

¿Solo se refiere entonces a la hostelería?
No, si observamos, se han subido los sueldos, han metido a directores generales de manera directa, amigos de sus partidos y siguen en ese camino. El que fue asesor de seguridad ciudadana, paso a ser director general y ahora concurre a una plaza. Ya ha pasado con el director de urbanismo y con otros cargos políticos. Vemos eso y siguen favoreciendo, no al sector de la construcción en sentido amplio, sino a determinados intereses, favoreciendo la aprobación de licencias a grandes constructoras, frente a las que solicitan autónomos y pymes para montar sus negocios, que pasan grandes tiempos de espera.

Ana Taboada. Foto: Iván G. Fernández


¿Cómo ha cambiado Oviedo durante estos últimos tres años?
En dos aspectos. Por un lado, la simbólica, que tiene que ver con abrir la ciudad a la diversidad. En lo cultural, se ha mantenido de cierta manera, pero no en lo que se refiere a la participación de muchos colectivos y de la ciudadanía en general, lo que básicamente supone crear comunidad. Lo primero que hicieron fue quitar los bancos arcoíris y poner una banderona, que ha sido su inversión más significativa. En materia de igualdad ha habido muchos retrocesos. Un ejemplo claro es el cambio de política en los puntos violeta en las fiestas, tuvimos muchos debates con la concejala de igualdad, que llegó a llamar feminazis a los miembros del consejo de igualdad. En lo material, la pérdida de las becas escolares es lo mas significativo. Estas favorecían la justicia social y se entendían desde nuestro gobierno como un derecho y no simplemente asistencialismo puro. Ayudaban también a las clases medias también, sobre todo en materia de conciliación. De esta manera llegaban a miles de familias. En políticas sociales, en general, ha habido grandes retrocesos y las políticas de medioambiente brillan por su ausencia. Se han cargado los proyectos de transformación urbana que podrían acercar Oviedo a una gran ciudad europea, por ejemplo, el proyecto del Bulevar. Hacen cosas tan escandalosas como pagar a una empresa, en este caso, para no hacer un proyecto. Lo que van a hacer ahora no es solucionar la contaminación en Ventanielles, ni coser esos barrios sino hacer intervenciones muy puntuales, poniendo un poco más de verde.


¿Qué sienten al ver desmanteladas o descartadas muchas de sus políticas y proyectos?
Nos da mucha tristeza. Nosotros, en cuatro años, además de pagar las deudas gabinianas, como el Calatrava y Villa Magdalena, que eran casi 60 millones de euros, aumentamos el gasto social. Vemos como este gobierno se ha cargado todos los avances que habíamos hecho durante nuestro mandato


¿Cuales son los grandes problemas ahora mismo?
Este ayuntamiento tiene un problema de personal, que viene del pasado. Gabino privatizó todo, salvo lo que no podía por ley. Ha descapitalizado de servicios públicos y también de personal al Ayuntamiento. Esa sangría acompañada de la jubilación masiva y de no hacer ofertas publicas empleo lleva a la situación actual. Nosotros sacamos, con mucho esfuerzo, la convocatoria de plazas en la policía y se terminaron los exámenes en este mandato. A esto hay que sumar el estado de los servicios sociales. Las trabajadoras están sepultadas en papeleo y tienen mucho retraso en otras cuestiones. No están haciendo nada para cubrirlo, no están fiscalizando los servicios públicos. Es un gobierno de grandes titulares, política de photocall, pero ni siquiera cumplen con lo que tienen el programa. Ni intervenir en la plaza de toros, ni en el ámbito del viejo hospital, y tampoco en los grandes temas como la Fábrica de Gas o La Vega, que deberían venir en un plan de recuperación del patrimonio industrial. El resultado es que nos encontramos en un concejo de grandes contenedores vacíos. El Mercado de la Corredoria, vacío y durante tres años no se ha sabido nada de él; el Palacio de los Niños que cerró sin alternativa ninguna, la Fábrica de Gas, la de Armas, el Calatrava. Son muchos espacios vacíos y ninguna hoja de ruta.

“Nos encontramos en un concejo de grandes contenedores vacíos”

También están pendientes de renovar algunos contratos importantes, ¿no?
Esto tiene que ver con eso. Llegó a pasar algo que nunca había pasado. Hemos estado casi un año entero sin contratar ningún servicio para el mantenimiento de aceras y viales, teniendo un concejo lleno de agujeros porque se les olvidó sacar a licitación publica un contrato. No han tenido la planificación necesaria y suficiente, a pesar de que nunca han tenido tantos liberados como en este mandato. Trece trabajadores, creo, fueron al paro por no renovar a tiempo ese contrato. Ahora están renovando contratos como son los de modernización e informática, prorrogando de manera ilegal los contratos, según han dicho los tribunales.

Infografía con el proyecto de Somos para La Vega.

Hablaba antes de los contenedores vacíos de Oviedo, ¿qué harían ustedes con ellos?
Para empezar, lo primero que habría que hacer es ser transparentes con la Fabrica de Armas. Luz y taquígrafos con las administraciones implicadas. Queremos que sea para la cultura, los servicios públicos, y la recuperación del patrimonio industrial. Que haya un recinto ferial, que se tiren los muros, que se pueda transitar por ese espacio y que la ciudadanía pueda conocerlo. Es fundamental que lo que pase en la vega se consensue políticamente y con los expertos y no busque intereses particulares; nos preocupa que se “quironice” el espacio como en Gijón.
-¿Qué hay del Calatrava?
-Hemos pagado 19 millones de euros solo por el palacio de congresos del calatrava, cuando nos pedían 96. Eso lo lleva un fondo suizo y será quien tenga que darle solución, esta no puede pasar por el Ayuntamiento.

“Lo primero que habría que hacer es ser transparentes con la Fabrica de Armas”


¿Qué opciones hay en otros espacios como la Fábrica de Gas?

En la Fabrica de Gas la sociedad civil están reclamando que eso tenga un uso cultural y diverso. Lo que no se puede hacer es dejar pasar el tiempo para estos dos ámbitos industriales. En La Vega se deben catalogar ya las naves que hay ahí, que haya una declaración BIC para su protección y que se trabaje como en el matadero de Madrid, dando juego a un montón de actividades o servicios públicos.

Se rumorea que habrá una cantidad importante de vivienda en La Vega, ¿le suena?
Con independencia que haya vivienda, que le daría una vida permanente a la zona, pediríamos que sea vivienda social y no solo responda a determinados intereses. Para eso tiene que haber un debate abierto.

Otro espacio parado es el viejo HUCA, ¿alguna idea?
Pediríamos al gobierno ovetense y al gobierno asturiano para que este mandato se empiece a hacer algo en la zona, empezando por demoler los edificios que no van a ser de uso. Eso va a suponer que, en un barrio muy castigado, haya actividad económica.

Estas políticas del actual gobierno, ¿facilitan que los jóvenes opten por abandonar Oviedo?
Sí. Entre otras cosas porque se genera un empleo que no es estable. Se basa todo en la hostelería y el turismo. La pandemia nos ha enseñado que estos sectores están sujetos a vaivenes. El modelo del PP ovetense no va en la línea de la economía verde y sostenible, con investigación, que fija futuro y población. Estamos sujetos a una economía precaria, a pesar de que la reforma laboral está consiguiendo avances al respecto. El gobierno local ha vuelto a dar la espalda a la universidad, retirando un convenio que eran unas becas de investigación, por importe de un millón de euros para favorecer la investigación a largo plazo. Con esto se garantizaba futuro y salarios.

Wenceslao López y Ana Taboada con parte de los ediles del tripartito. Foto: Pablo Lorenzana.

¿Por qué cree que perdieron gran parte del apoyo de la ciudadanía en las pasadas elecciones?
Oviedo es un espacio complejo y especial a la hora de abordarlo desde la izquierda. Nos ha influido mucho, como a todos el municipalismo del cambio, lo que paso a nivel estatal. Sufrimos un retroceso por el proces catalán y las elecciones a nivel estatal. Se polarizó mucho el voto entre el PSOE y la derecha. Tampoco ha favorecido que el PSOE, en los últimos seis meses, fuera anunciando que iba a pactar con Ciudadanos y que no quería seguir en un gobierno con nosotros, porque éramos la parte incomoda, al querer hacer políticas transformadoras y romper con la dinámica. Como ha pasado en el gobierno del Estado, al final, el PSOE ha tenido que conformar un gobierno progresista con el mismo espacio político, eso ha provocado que hicieran políticas que, sin nosotros, nunca hubieran hecho.

¿Habrá unidad en la izquierda de cara a las próximas elecciones municipales?
Hemos tenido reuniones con PSOE e IU al respecto, haciendo estas reflexiones. Con ellos hablamos de un plan común y creo que el tiempo nos ha dado la razón. El Psoe siempre tiene que mirar a la izquierda. El centro no existe. Las políticas transversales son las sociales, eso es el centro, poner a las personas en medio. Esperamos que en un futuro se produzcan espacios políticos.

En el pasado, ¿les ha dividido ser un gobierno tan maltratado?
No hemos tenido un gobierno nada fácil. Después de 24 años del PP, tener que pagar los pufos que venían desde hacía más de 10 años ya suponía un lastre. Cualquier diferencia, algo normal en un gobierno plural, era amplificada por los medios de comunicación. Esa persecución que nos ha llevado al banquillo por autorizar un mercado ecológico frente a todo lo que ha pasado en esta ciudad que ha sido un escándalo.

¿Aglutinarán a IU para las próximas elecciones o seguirán con la marca Somos?
Tenemos que sentarnos y verlo. Yo soy muy defensora de que el municipalismo debe tener una identidad propia. Sin embargo, es necesario que Podemos y las diferentes fuerzas se acerquen y trabajen en hacer algo ganador en Oviedo. Es la única forma de romper con esta ciudad dormida. Siempre hemos planteado que sería muy importante que IU y nosotros fuéramos juntos. Ahora mismo la única izquierda que hay a la izquierda del PSOE es Somos. IU ha desaparecido del ámbito municipal. Es necesario que se siga planteando y que seguimos en contacto.

¿Han sanado las heridas en el seno de Somos tras la marcha de Anabel Santiago?
Toca ser responsables con el momento político que estamos. Esa responsabilidad colectiva con el proyecto es lo que deberíamos estar pensando. Quiero pensar que en eso estamos los tres concejales y el espacio político que compartimos. De cara a lo que pueda pasar, lo que creo es que la ciudadanía nos demanda esa responsabilidad. Creo que debe entrar sabia nueva y que nuestra obligación es transmitir a los que vengan nuestra experiencia durante estos años, gobernando y en la oposición.

¿Descarta continuar?
Sí.

Aunque ya no estará, ¿ve opciones de que la izquierda recupere el gobierno dentro de un año?

Creo que con el contexto político tan cambiante, dependerá del contexto del momento. No solo irá en función del empuje que podamos lograr nosotros, sino de la inteligencia colectiva que puedan tener el resto de las fuerzas. Que veamos que, así como Yolanda Díaz plantea eso, la inteligencia colectiva, tenemos que hacerlo también en Oviedo. La alternativa seria un gobierno de PP y Vox. Si ya hemos vuelto al blanco y negro en esta ciudad, por ejemplo el asunto de la memoria democrática, ese retroceso va a ser aun mayor de entrar Vox. Si este gobierno ya no escucha a la ciudadanía…Seria un gobierno para unos pocos. Oviedo es mucho más plural y diverso. Nos debemos a ese Oviedo y así debe ser.

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