La frase de Simone de Beauvoir “No se nace mujer: se llega a serlo” nos pueda ayudar a situarnos en el núcleo central del objetivo primordial de la educación en el siglo XXI que es la coeducación.
Este nuevo sistema pretende incluir y visibilizar la realidad de este colectivo en los contextos educativos, deconstruir los prejuicios y eliminar las conductas discriminatorias y el acoso por orientación sexual o identidad de género.
El naciente año da esperanza a nuevos sueños y, personalmente, deseo que el 2022 sea el momento de inicio de un nuevo ciclo de vida que acoja la diversidad no solo con justicia, sino también con ternura.